En Avellaneda, dos vecinas llevan adelante una tarea silenciosa pero vital: rescatar, alimentar y dar en adopción a animales abandonados. Verónica Mendoza y Silvia Suárez trabajan de manera independiente, sin apoyo económico ni institucional, movidas únicamente por la vocación y el amor hacia los animales.
Verónica creó la página “4 Patitas Avellaneda” para separar su vida personal de la tarea de rescate. Su historia comenzó hace más de una década, cuando su hija rescató un gato que terminó robándole el corazón. Hoy convive con más de 30 animales en tránsito, muchos de ellos en estado crítico, y los prepara para encontrar un nuevo hogar. “Tengo hijos de dos patas y de cuatro”, dice con orgullo.
Silvia, por su parte, recuerda que desde siempre los animales fueron parte de su vida. Ha rescatado perros, gatos, aves e incluso una gallina de guinea. Ambas coinciden en que la castración es la única herramienta efectiva para controlar la superpoblación y evitar el sufrimiento de los animales en la calle.
El trabajo no es sencillo: trasladar animales, pagar fletes, comprar jaulas y medicación, organizar rifas para costear gastos. Todo sale de su bolsillo. Además, alimentan colonias enteras de gatos en barrios vulnerables como Villa Inflamable y Villa Tranquila. “La gente cree que vivimos de esto, pero es voluntariado. Nadie nos paga”, remarcan.
Las rescatistas también señalan la falta de campañas de difusión y de centros de castración accesibles en los barrios. Proponen la creación de unidades móviles veterinarias, similares a los UPA, para que los vecinos puedan castrar cerca de sus casas. “El tiempo que lleva abandonar una caja con cachorros es el mismo que llevar a castrar a la madre”, recuerdan.
La tarea de Silvia y Verónica es un llamado a la responsabilidad y empatía de los vecinos: adoptar con compromiso, castrar, vacunar y no ser indiferentes ante el sufrimiento animal.
Cómo colaborar
- Verónica Mendoza (4 Patitas Avellaneda): 11 2596 6789 – redes sociales bajo su nombre
- Silvia Suárez (“Karen de los gatos”): 15 6142 3238
Ambas difunden su trabajo en redes y agradecen cualquier ayuda, desde alimento hasta transporte. Porque, como dicen ellas, “ganamos batallas, pero la guerra contra el abandono solo se puede enfrentar con la ayuda de todos”.
