La Comisión de Investigaciones Científicas (CIC), el equivalente al Conicet bonaerense, abrió la convocatoria para los Proyectos Bonaerenses de Federalización de la Ciencia y la Tecnología. En este sentido, las universidades públicas con sede en Buenos Aires deberán asociarse con unidades académicas de otras partes del país para proponer trabajos de investigación, desarrollo y transferencia destinados a brindar soluciones a problemas centrales para la Provincia. Por un lado, el objetivo es construir redes de estudio en temas estratégicos para la región. Por otro lado, el propósito es continuar con líneas que quedaron frenadas por la falta de financiamiento del gobierno nacional. Los ejes que propuso la CIC están vinculados a energía, agua, salud, ambiente, federalismo, empleo y juventud. Frente a la motosierra libertaria, la propuesta impulsada por el gobierno de Kicillof redobla los esfuerzos para que las Casas de Altos Estudios y sus científicos sean parte de la solución.
“La convocatoria atiende a la necesidad de sostener y promover la cooperación científica entre las universidades bonaerenses y las de otras provincias. Las redes abordarán temas estratégicos que son transversales para el desarrollo de nuestro país y constituyen un paso importante en impulsar la integración federal, en un momento en que el gobierno desarticula y pone en crisis el sistema nacional de ciencia y tecnología”, sostiene Roberto Salvarezza, presidente de la CIC, en diálogo con la Agencia de Noticias Científicas de la Universidad Nacional de Quilmes.
Las áreas temáticas que propuso la Comisión son: energía y transición energética, acceso y manejo de recursos hídricos, estudios del mar, salud (cannabis y dengue – arbovirus), cambio climático y ambiente, federalismo, empleo y juventud. Para participar, los equipos de investigación de universidades públicas con sede en PBA tienen que conformar una red con universidades o unidades académicas de otras regiones del país que hayan suscripto un convenio marco de colaboración con el gobierno bonaerense.
La convocatoria estará abierta hasta el 21 de octubre y tendrá dos tramos. Quienes se inscriban y queden seleccionados para el primero, tendrán 90 días corridos desde la adjudicación para formular un proyecto que deberá tener un año de duración. Allí, cada proyecto obtendrá un financiamiento inicial de tres millones de pesos para realizar reuniones y preparar el segundo tramo. Por su parte, el segundo tramo comenzará en 2026 con aquellos trabajos que hayan sido seleccionados para continuar.
El camino inverso
A nivel nacional, el panorama para la ciencia y la tecnología es trágico. En este aspecto, la ruta que inició el Poder Ejecutivo en diciembre de 2023 está marcada por recortes, desfinanciamiento, fusiones, intervenciones, privatizaciones y salarios muy por debajo de la inflación. Tal es así, que el presupuesto 2026 presentado en cadena nacional marca la inversión más baja desde el regreso de la democracia para el sector de CyT.
“Vemos con preocupación cómo el gobierno por un lado cristaliza el enorme ajuste que realiza a nuestras universidades y organismos de ciencia y tecnología con la justificación de déficit cero en el presupuesto 2026, y por el otro lado exime de las retenciones al agro”, resalta Salvarezza, exministro de Ciencia, Tecnología e Innovación.
A contramano, el gobierno bonaerense no sólo funciona como refugio, sino que intenta ampliarse pese a las dificultades. A la convocatoria para los Proyectos Bonaerenses de Federalización de la Ciencia y la Tecnología hay que sumarle el Fondo de Innovación Tecnológica de Buenos Aires, las Becas Bonaerenses de Investigación, la revista Perspectivas Bonaerenses, y el ingreso a la Carrera del Personal de Apoyo a la Investigación y Desarrollo para centros de la CIC, entre otras iniciativas.
Por Nicolás Retamar