











En el marco del Día de la Educación Técnica, alumnos de la Escuela de Educación Secundaria Técnica Nº1 “José Ingenieros” de Avellaneda realizaron la primera prueba de flotabilidad de un proyecto que vienen desarrollando desde 2023: la construcción de dos embarcaciones, una a motor y otra de madera y fibra. La jornada se llevó a cabo en la Laguna de la Saladita, con la presencia del intendente Jorge Ferraresi, quien acompañó a los estudiantes de 7º año junto a sus compañeros de 4º, 5º y 6º año.
El proyecto, nacido en el área de Sistemas Constructivos Navales, busca integrar los conocimientos teóricos y prácticos de los talleres especializados. “Esto no es una botadura propiamente dicha, sino una prueba de flotabilidad. Más adelante, con Prefectura, daremos dominio a las embarcaciones. Todo se hace por etapas”, explicó el director del establecimiento, Guillermo Di Filippo, en diálogo con nuestro cronista.
Un aprendizaje integral
Di Filippo destacó que la iniciativa comenzó hace tres años, con alumnos que hoy ya egresaron y otros que actualmente cursan el último año. “El objetivo pedagógico es poner en valor todos los saberes de diseño naval, sistemas constructivos e instalaciones de buques. Es una alegría enorme ver cómo los chicos superan las expectativas. Siempre digo que el mejor docente es aquel que logra que sus alumnos lo superen”, señaló con orgullo.
El director también subrayó la importancia de la comunidad educativa y empresarial en el acompañamiento del proyecto, aunque advirtió sobre las dificultades que enfrentan las escuelas técnicas tras la suspensión de aportes del INET en el nuevo presupuesto nacional. “Se derogó el artículo que permitía que insumos y herramientas lleguen a las escuelas técnicas del país”, recordó.
Los detalles del bote
El prototipo presentado corresponde a un “Jon Boat”, embarcación de fondo plano y arcos cuadrados, diseñada para aguas poco profundas y tranquilas.
- Peso del casco: 87 kg
- Peso total con accesorios: 98 kg
- Capacidad: un navegante de hasta 90 kg
- Calado máximo: 15 cm
El bote fue construido íntegramente en madera de pino y terciado fenólico, laminado con resina poliéster y fibra de vidrio, reforzado en sus bordes críticos y recubierto con pintura especial para PRFV y esmalte sintético. Su propulsión es manual, mediante dos rotores circulares de ocho paletas cada uno.
Orgullo y futuro
La prueba coincidió con los festejos por el Día de la Educación Técnica, convirtiéndose en un símbolo del esfuerzo y la creatividad de los estudiantes. “Es una gran satisfacción, un orgullo por los chicos. Cuanto más ellos superen al maestro, mayor es la alegría”, resumió Di Filippo.
El proyecto continuará con nuevas etapas de prueba y certificación, siempre con el acompañamiento de la comunidad educativa y el compromiso de seguir defendiendo la educación pública y técnica en Avellaneda.




